AL ACTO DE COLOCACIÓN DE LAS BALDOSAS POR LA MEMORIA Y LOS D.D.H.H.
16/09/2011
Para nosotros no es menor ser parte de una Escuela Pública dependiente de la UBA cuyo proyecto educativo incluye- como parte del mismo- una placa que recuerda a nuestros alumnos detenidos-desaparecidos por la dictadura militar, como reaseguro de que las próximas generaciones no van a poder evitar verse en esa placa - que deliberadamente se hizo como un espejo - y hacer preguntas que los docentes de hoy y mañana no vamos a poder evitar responder.
Asimismo, en ese lento camino de construcción de nuestra identidad, participamos como Comunidad Educativa en todas las manifestaciones y marchas por la memoria y la justicia en las cuales, junto a nuestros alumnos como protagonistas centrales, hacemos realidad la consigna de nuestra placa: “A treinta y uno años de la noche, los lápices siguen escribiendo. No olvidamos. No perdonamos.” En esa memoria reside la fortaleza de nuestra Escuela como proyecto educativo integral.
Y fue esa memoria la que se pretendió desmontar en estos últimos años en donde molecularmente iban siendo calladas, silenciadas, esas voces que nos acompañaron en la construcción de un proyecto educativo. Y es por eso, justamente, que esta baldosa, que recuerda a los “militantes populares detenidos-desaparecidos o asesinados por el terrorismo de estado” adquiere un significado tan potente, con aspiración refundacional.
El dictador Massera dijo una vez que en este país no serían necesarios más golpes de estado porque las nuevas generaciones pensarían como ellos querían que pensasen. En nuestros alumnos de hoy, le podemos decir al poder – con orgullo de docentes - ¡no lo consiguieron!. Y tenemos la certeza de que la batalla que hemos librado estos años por la memoria y los derechos humanos no fue en vano: esta baldosa así lo demuestra.
¡No olvidamos! ¡Nos perdonamos! ¡Los lápices siguen escribiendo!
AGD - ESCCP -UBA
