jueves, 19 de mayo de 2011

COMUNICADO DE PRENSA

La UBA en su página oficial publicó la renuncia a su cargo de Rector de la ESCCPellegrini, Jorge Fornasari, cuya gestión fuese fuertemente cuestionada por la mayoría de la comunidad de la Escuela.
Su renuncia obedece, según manifiesta a “la situación de salud personal” así como a “facilitar el camino hacia una solución responsable de los problemas que son de público conocimiento.”
El cargo de Rector de la Escuela es el único de carácter electivo, el resto de su equipo de gestión fue designado por el propio Fornasari, de la misma manera que lo hace un presidente con sus ministros. Por lo tanto, la renuncia de Fornasari debería ser acompañada por la de su equipo de gestión, por cuestiones formales y éticas a fin de, justamente, “facilitar el camino hacia una solución responsable de los problemas”. Hasta el momento – y es preocupante – eso no ocurrió.

La renuncia del Rector y de su equipo de gestión significa que el Consejo Superior deberá designar un rector transitorio, hasta que se convoque al CER (Consejo de Escuela Resolutivo) en un plazo no mayor a 15 días y este organismo pueda proponer un nuevo Rector/a para el establecimiento que verdaderamente cuente con el consenso de la mayoría de la comunidad del Carlos Pellegrini. Esto significa autoridades profundamente comprometidas con la democracia, el pluralismo, la participación ciudadana y con el proyecto educativo que sintetiza esos valores,  ya que fue eso lo que posibilitó el prestigio de nuestra institución universitaria.
El equipo de gestión (Juarez Roca, Valeria Bergman y Gustavo Petracca) no están en condiciones de asumir dicha transición porque sus declaraciones y actitudes francamente discriminatorias y  persecutorias para con la comunidad de la escuela – muchas de ellas reñidas con la propia democracia - los torna inhábiles para poder garantizar un clima de trabajo en la escuela que pueda acompañar una mesa de diálogo con el Rectorado de la UBA que avance en la construcción de consensos estables.

Señalamos que la partida de este equipo de gestión dejó daños al interior de la escuela que están presentes y deben ser desmontadas, como las sanciones a los alumnos y amenazas escritas a docentes y verbales a no docentes; las designaciones de profesores sin ninguna selección académica ni pedagógica vulnerando derechos de sus pares y de los propios directores de departamento electos, por señalar dos de las más graves y aberrantes. 

La AGD reitera su predisposición a abrir una mesa de diálogo con el rectorado de la UBA que rápidamente demarque los acuerdos y permita salir de este largo conflicto.

Carta de renuncia del Lic. Jorge Fornasari


AGD PELLEGRINI     CONADUH           UBA